En el versículo 6 del capítulo 33 de los Salmos versá así. El Señor tan solo habló y los cielos fueron creados, sopló la palabra y nacieron todas las estrellas, asignó los límites al mar y encerró los océanos en enormes depósitos.
Que todo el mundo tema al Señor y todos estén ante Él con temor reverente. Pues cuando habló el mundo comenzó a existir, apareció por orden del Señor. El Señor frustra los planes de las naciones y hace fracasar todas sus intrigas.
Pero los planes del Señor se mantienen firmes para siempre, sus propósitos nunca serán frustrados. Nunca dice qué alegría para la nación cuyo Dios es el Señor, cuyo pueblo Él eligió como herencia. El Señor mira desde el cielo y ve toda la raza humana.
Desde su trono observa a todos los que viven en la tierra. Él hizo el corazón de ellos así que entiende todo lo que hacen. El ejército mejor equipado no puede salvar a un rey.
Una gran fuerza suficiente para salvar a un guerrero. No confíes en tu caballo de guerra para obtener la victoria. Por mucha fuerza que tenga no te puede salvar.
Pero el Señor vela por los que le temen por aquellos que convían en su amor inagotable. Los rescata de la muerte y los mantiene convida en tiempos de hambre. Nosotros ponemos nuestra esperanza en el Señor.
Eres nuestra ayuda y nuestro escudo. Él se alegra en el se alegra nuestro corazón porque confiamos en su santo nombre que tu amor inagotable nos rodee el Señor porque sólo en ti está nuestra esperanza. En la reciente cumbre de la ONU hubo algunos líderes importantes de naciones que han estado en crisis por muchos años que hubieran una reportar una tremenda recuperación.
No vamos a nombrar los países ni los ni los presidentes porque no queremos involucrarnos en temas políticos en este momento. Pero lo que es notable de esas intervenciones es que los países que muestran temor de Dios son los países que en este momento están viendo la misericordia, el rescate de Dios tanto de sus economías como de su esperanza, como de sus sistemas murales. Eso debe decirnos algo.
Lo que pasa es que hubo un diseño o un diseño desde el principio en la creación, un diseño para las naciones. Hoy ya no estamos hablando de nuestro corazón particular sino del corazón de las naciones. Nacieron todas las naciones bajo la mirada a Dios, bajo su acción poderosa y creadora.
Y dice que su plan era que todo el mundo temiera su nombre para que pudieran estar delante del contemo reverente. Es su orden el que necesitamos. Las naciones últimamente han estado produciendo planes.
Que la agenda tal, que la agenda hacia los próximos 20 años, los próximos 10 años, mecanismos de control, mecanismos de su presión de libertades, atentado contra los derechos fundamentales de los seres humanos en su conciencia y en su mayor domía. Como
tocar, por ejemplo, las libertades de las personas. Dice el Señor mira desde el cielo y ve toda la razón humana.
Observa desde su trono a todos los que viven en la Tierra. Entiende todo lo que hacen. Las naciones fueron creadas por él.
Las naciones están en sus manos. Las naciones cuando Cristo vino como Señor y Redentor están en sus manos. Las naciones van a ser rescatadas de forma violenta, violenta literalmente.
Sacadas de estas terribles tendencias de muerte, de la hambre, de la bruna, de la destrucción repentina. Dios no ha perdido en control queridos. Muchas veces estamos pensando no, estamos en manos de una élite perversa que ya tomó el control de todo, pero no es así.
Solo ha metido un rey de reyes y Señor de señores delante de quien toda rodilla se doblará y toda lengua confesará que Él es el Señor. No olvidemos eso. Para quienes estamos oprimidos en sistemas.
Aquí está la promesa más grande. El rescate de la muerte y los mantiene a los que le temen a Dios convida en tiempos de hambre. Sí tenemos temor de lo que puede pasar con nuestras naciones.
Claro que sí. Tenemos temor de los colombianos de lo que pueda pasar con Colombia. Claro que sí.
Pero recuerda que tienes una protección muy especial. Si confías en su amor inagotable y si mantienes tu esperanza en el Señor, porque Él será tu ayuda y tu escudo aún en los tiempos más difíciles. El Señor está obrando hoy en los lugares más terribles donde está la guerra fratricida en los diferentes lugares de la Tierra.
No olvidemos que Él no ha perdido el control. Él es el creador. Él es el Señor.
Él es el rescatador. Así que hoy oramos por las naciones para que puedan someterse, para que puedan decir como estos presidentes que dijeron por qué Él es el creador. Otro dijo porque la espiritualidad está por encima de toda la economía.
Así que recordemos pedirle a Dios también gobernantes que le teman a Él. Porque en esas acciones nosotros veremos también fruto de justicia y directitud para nuestros propios pueblos.